No importa lo lent@ vayas,
mientras no te detengas.
Lo único que puede hacerte
fracasar es rendirte,
por ejemplo, si no tenemos
tiempo para meditar todos los días,
podemos cambiar
la frecuencia a día de por medio,
una vez a la semana, una
vez al mes...,
hasta poder volver a meditar
más seguido.
Avanzar aunque sea de forma
lenta,
es siempre mejor que detenerse completamente.
Si todo
ocurriera como me gusta o como lo hubiera
planeado
nunca...
¡¡ Pensar en
huir sería un pensamiento mío !!.
Mi vida sería
una repetición infinita de buenos resultados...
A
veces para evitar enfrentarnos a la realidad que vivimos...
huímos...
y nos
enfocamos en la culpa del otr@ por las cosas malas que nos suceden
y queremos
huir y continuar huyendo sin ver...
Evitar buscar
las respuestas es un desafíos... es educar a nuestro SER.
Aprender
a dejar de huir de un@ mism@ puede hacer una gran diferencia entre una vida de
escapadas... o una
vida plena con autocontrol.
Besos en cada
mejilla Marga.
Si yo tuviera un
corazón,
escribiría mi odio
sobre el hielo,
y esperaría a que
saliera el sol.
Gabriel
García Márquez
Hola! Antes que nada, darte las gracias por quedarte en mi rinconcito particular. Yo encantada me quedo también por tu fabuloso blog, Me ha gustado muchísimo y, ya lo he puesto entre mis listado de blogs favoritos.
ResponderEliminarQué entrada más buena y cierta. Solamente el haberlo intentado, ya no hemos fracasado. Y respecto a la culpa, somos responsables de lo que nos pasa, no vale de nada buscar culpables. Besitos